Medias Noches y Bollos Suizos

Ingredientes: 500 gr de harina / 250 gr de leche / 130 gr mantequilla / 50 gr de azúcar / 20 gr de levadura de panadero / un huevo / una pizca de sal.

Prepararemos la masa en la thermomix. Por supuesto podemos mezclar y amasar todos los ingredientes «a mano», pero a mi me va a ser más cómodo así.

Incluimos la leche, la mantequilla, el azúcar y la sal en el vaso. Programamos 4 minutos a 37º. Este tiempo será según la temperatura de los ingredientes porque si está a temperatura ambiente no será necesario tanto. Cuando estén mezclados añadimos la levadura y mezclamos a velocidad 4 durante 20 segundos. Debería estar todo el líquido homogeneo.

Programamos posición vaso cerrado y función «espiga». Añadimos la harina poco a poco por el orificio de la tapa. Seguimos amasando y añadimos harina hasta que no quede mojada y no se pegue a las manos.

Dejamos que suba la masa aproximadadmente 1 hora. Según el autor original lo ponemos en un plato o la bandeja del horno y lo envolvemos en una bolsa de plástico grande quedando holgada la masa y con espacio para que suba. Otra opción es meterla en un bol grande y taparlo con un trozo de film transparente. Lo hagamos como lo hagamos debemos dejarlo en un sitio cálido, no en la nevera. Incluso se podría meter en el horno a 40º. La verdad es que en estos días de calor a mi no me ha hecho falta más que dejarlo sobre la encimera :-).

Precalentamos el horno a 190º. Con la masa hacemos bolitas de 3 o 4 cm o formas algo más complejas (como la trenza que yo he hecho). No obstante debemos tener en cuenta que no debe ser demasiado grueso lo que hagamos y que hay que dejar mucho espacio entre cada pieza porque volverá a aumentar de tamaño. Pintamos con el huevo batido.

Horneamos unos 10 ~ 15 minutos. Igual que el hojaldre, quedará hecho cuando esté «bonito».

Fuente original: «Mis mejores recetas con Thermomix31». Cristina Galiano. Ed Espasa.

Hojaldres de crema

Ingredientes: dos láminas de hojaldre / crema pastelera / la yema de un huevo / azúcar

Añadidos: almendras o avellanas picadas / pasas.

Ponemos a calentar el horno a 220º mientras preparamos los hojaldres.

Prepararemos crema pastelera. Podemos hacerla nosotros (no es más que huevo, maicena, azúcar y leche) que creo que la he puesto aquí en alguna ocasión o podemos usar el «truco» que me enseñó mi madre: usar «Potax», que es una especie de flan / natillas (que como flan no me hace ninguna gracia, siempre he sido de Royal 😉 ). En la caja explica cómo hacer flan. Seguimos las instrucciones pero en vez de usar 500 ml de leche usamos 400. Así saldrá una especie de crema pastelera más espesa. Dejamos que se enfríe un poco.

Extendemos las láminas de hojaldre sobre el papel de horno. Usamos la misma «técnica» de decoración en el hojaldre que con el solomillo hojaldrado (ver el post aquí). Así, extendemos la crema pastelera en el centro y cerramos alternando tiras de hojaldre (igual que el solomillo).

Pintamos con llema de huevo en la parte superior del hojaldre. Espolvoreamos azúcar y horneamos, sobre unos 15 minutos a 220º (arriba y abajo). Según el horno será más o menos tiempo, pero el hojaldre es fácil saber si está hecho: cuando el huevo se ha dorado y el hojaldre ha levantado estará hecho.

Añadidos: Podemos añadir pasas en la crema pastelera (al echarlo encima del hojaldre) y/o almendras picadas por la superficie (yo usé avellanas americanas picadas).

Original de alcoiama en mundorecetas.com

Tarta de queso fresco

Ingredientes: Un queso fresco de 250 gr (de los «medianitos) / una lata pequeña de leche condensada / 250 gr de nata / 5 huevos

Primero batimos los huevos con la batidora. Añadimos el resto de ingredientes y batimos todo con la batidora (o la máquinita que tengamos) hasta que quede una crema fina. Hay que procurar que el queso no quede en grumos sino homogéneo con en la crema.

Vertemos en un molde de silicona. No debemos preocuparnos por la presentación, porque después se podrá desmoldar perfectamente (al menos a mi me ocurre así). Horneamos a 180º (arriba y abajo) unos 30 minutos. Estará hecho cuando pinchemos con un palito y salga limpio.

Ahora viene el truco: cuando esté listo no lo saques del horno. Apaga el horno y déjalo con la puerta entreabierta para que la tarta no se baje. Si lo sacamos y se enfría rápidamente, se vendrá abajo y perderá el volumen que ha obtenido. Si esto ocurriese no debemos preocuparnos, porque aún estará bueno pero menos espectacular.

Cuando ya esté frío el horno (habrá pasado un buen rato) lo desmoldamos en un plato bonito y lo cubrimos con mermelada del sabor que más nos guste (arándanos es lo clásico, pero de fresas está muy rico 😉 ). Enfriamos en la nevera y ¡¡¡»A comer»!!!

Original de Sonia aquí.

Mermelada de Granada

Ingredientes: 6 o 7 granadas / 500 gr de azucar / zumo de un limón / 1 cucharada de canela en polvo.

Esta es la primera receta que publicaré que la haya preparado en la Thermomix ;). No obstante cualquier cosa que se pepara con ella, se puede preparar con «cacharros» normales (cacerola, batidora, colador, etc ;).

Desgranar la granada (¡qué bonito suena!) y pesar todos los granos. Reservaremos la mitad del peso en azúcar. Si por ejemplo como a mi te sale 1 kg de granos usarás 500 gr de azúcar. En la thermomix trituraremos los granos de fruta con 20 segundos a velocidad 5 (no más rápido para que no se rompan las semillas).

Si no queremos encontrarnos los granos en la mermelada final, pasaremos el zumo obtenido por un chino (yo usé el cestillo de la thermomix). Creo que quedará más bonita con los granos pero es posible que haya alguien que no le gusta.

Añadimos al zumo en el vaso el azucar, el zumo de limón y la canela. Programar 30 minutos a temperatura Varoma velocidad 1. Esto será al principio, porque este preparado tiende a «subir» cuando hierve (igual que la leche), así que estaremos muy pendientes para subir la velocidad (como al 3) cuando empiece a subir y así será como si lo estuviésemos moviendo continuamente. También ayuda no tapar con el cubilete o dejarlo «cejado» (ni tapado ni destapado).

Probablemente cuando pase el tiempo necesite aún más tiempo porque aún esté muy líquida. Hay que pensar que debe evaporarse casi todo el agua de la fruta y la granada es casi todo agua. La verdad es que a mi me costó algo más de una hora.

Para saber cuando está en punto de mermelada, mojaremos en ella una cucharada y la enfriaremos en un plato (sí, soplando por ejemplo 😉 . Veremos así si está ya con la textura que queremos. Bien es verdad que a mi me quedó demasiado espesa, porque cuando se enfría en la nevera cuaja demasiado (nada que no solucione un poquitín de microondas al usarla 😉 ).

Por cierto: ¡¡¡Gracias por las granadas «cuñao»!!!

Fuente original: http://olorajazmin.blogspot.com/2009/11/mermelada-de-granada-la-canela.html

Musaca

Ingredientes: 5 patatas medianas / 5 berenjenas / 2 botes de salsa boloñesa / queso rallado para gratinar.

Pelamos y cortamos en láminas las patatas con grosor de medio centímetro. Las lavamos bien bajo el grifo y tras escurrirlas las freimos en la freidora a fuego lento. En realidad lo que queremos es que estén muy tiernas (como si fuésemos a hacer tortilla de patatas).

Hacemos lo mismo con las berenjenas. Yo no les he quitado la piel, pero esto ya es a tu gusto. Cuando las saquemos del aceite las escurrimos en un papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.

Suponemos que la boloñesa ya la tendremos preparada. Para hacer esta salsa podemos usar la receta que tengo en esta página (Receta Salsa Boloñesa), otra receta o comprarla «de bote». De momento, para que nos hagamos una idea yo usé dos botes de 400 gr de boloñesa hechos por mi.

En una fuente de horno (yo usé una Pirex) echamos un chorrito pequeño de aceite. Pondremos una capa de patatas, una de berenjenas y una de salsa boloñesa. A mi me han cabido dos repeticiones acabando con berenjena (patata-berenjena-salsa-patata-berenjena-salsa-berenjena). Para finalizar cubrimos con queso rallado para gratinar y lo metemos al horno una media hora a media altura y 180º. Como todo está cocinado no hay que dejarlo mucho tiempo, pero así termina de hacerse. Finalizamos con un golpe de gratinador para que el queso quede crujiente y listo.

Por cierto: ¡¡¡Gracias Juan por las berenjenas!!!! (y los tomates, y los pimientos… 😉 )

Tortilla de Patatas

Ingredientes: 500 gr Patatas / 4 Huevos / Sal / Aceite de oliva.

Pelamos las patatas y las lavamos bien. Las troceamos, bien en cuadraditos, bien en rodajas de medio centímetro de grosor.

Freimos las patatas en aceite de oliva, pero OJO!!!: a fuego lento, muy muy despacio. Por comodidad podemos usar la freidora, pero insisto en que debe estar a temperatura media, nunca «a tope». La idea es que las patatas se hagan por dentro pero no queden «fritas» con la corteza crujiente (como las papas fritas junto al huevo, vaya 😉 ).

Batimos los huevos en un bol (con un tenedor). Sazonamos y añadimos las patatas.
Ojo ahora, que es el «truco» de mi abuela: machacamos (sí, sí: machacamos) las patatas con un tenedor. No hace falta hacer puré, sólamente es para que se empapen bien las patatas de huevo.

Para la cantidad que estamos haciendo usaremos una sartén antiadherente pequeñita, más o menos de 20 cm. Calentamos un chorrito de aceite (no hace falta mucho) y añadimos las patatas con el huevo del bol. Ponemos a fuego lento/medio unos 10 minutos. El tiempo dependerá del grosor de la tortilla. Cuanto más gruesa más tiempo, pero más lento el fuego.

Le damos la vuelta a la tortilla con la ayuda de un plato llano. Cuidado no nos vayamos a quemar. Que no se nos ocurra voltear la tortilla en el aire, que podemos «formar» una en la cocina importante :-D.

Y si te preguntas: «¿Y la cebolla? ¡A mi me gusta con cebolla!».

Sobre gustos no hay nada escrito, aunque yo en principio la prefiero sin cebolla. Aunque es más pesada de comer al no tener el dulzor y suavidad que aporta la cebolla, creo que la digestión es mejor.

Si la queremos con cebolla, sólo hay que cortarla en daditos y la podemos feir en la misma freidora como hemos hecho con las patatas. Es mi impresión que deben hacerse por separado, porque la patata y la cebolla tienen tiempos distintos.

Extras
La tortilla de patata tal como la hemos hecho arriba puede servir de base para tortillas más elaboradas: con calabacín, con pimientos, abierta por la mitad con salsa, rellena de jamon codido y queso, con queso, con chorizo, usarla como si fuese la base de una pizza («tortipizza» le llama Erdecai al invento). En particular la de la foto tenía tiritas de chorizo.

Gambas al pil-pil

Ingredientes: 1/2 kg de gambas o langostinos cocidos / 1 cabeza de ajo / 1 guindilla / perejil picado / vino dulce moscatel / aceite / sal / pimentón picante.

Pelamos las gambas cocidas. Se pueden comprar ya cocidas y así ahorramos tiempo. Si no tenemos las gambas cocidas, podemos cocerlas nosotros con agua hirviendo y una hojita de laurel.

Disponemos las gambas en un recipiente. Picamos todo el ajo muy pequeñito y se lo añadimos a las gambas. Igualmente con la guindilla. Añadimos un buen puñado de perejil picado, una cucharadita rasa de pimentón picante y sazonamos. Añadimos un chorreón de aceite y el doble de vino dulce que de aceite; lo suficiente para cubrir todo el macerado. Lo mezclamos bien y lo metemos en la nevera. Es preferible hacerlo el día anterior para que esté toda la noche macerando, porque así se impregnarán más las gambas del sabor. En mi caso usé un vino moscatel de la Axarquía que me trajeron mis padres que es un escándalo ;).

Un rato antes lo disponemos en un cazo y lo ponemos a calentar a fuego suave. Es importante que no esté muy fuerte. Lo dejamos al fuego unos 20 minutos hasta que el vino haya reducido.

Para presentarlo es ideal usar un recipiente de barro, aunque podemos probar con un plato blanco para que haga mayor contraste de colores ;).

Esta es la receta de mi cuñada Isa. Es la única que he encontrado que se hace de esta manera (normalmente se frien con ajito y listo), y ni que decir tiene que está muchísimo más buena así que de cualquier otra forma. Deja un gusto mezcla de picante y dulce que hará que se acabe todo el pan que tengamos mojando en la salsita. ¡Gracias «Cuñá»!

Varitas de Rosada empanada al Horno

Ingredientes: 300 gr de rosada (aunque vale cualquier otro pescado parecido: panga, gallo, hay infinidad), 2 huevos, pan rallado.

Se cortan los trozos del pescado en trozos a ser posible como si fueran «varitas». Las empanamos como si fueran filetes de carne: primero mojamos en el huevo y luego las pasamos por el pan rallado. Si queremos que salgan más crujientes y con empanado más grueso, lo pasamos otra vez por el huevo y el pan (yo lo hice así).

Ahora si queremos los podemos freir en la freidora, pero para que salgan cero-aceitosas las dispondremos en la bandeja del horno sobre un papel sulfurizado (o una lámina de teflón o de silicona) para que no se pegue. Lo metemos al horno a media altura a unos 200º y las horneamos hasta que esté el pan dorado. Se puede servir con un arroz blanco y salteado con ajito y aderezar con mayonesa, de lo contrario resultará un poco seco.

Es una manera más de ofrecer a aquellos que no les gusta el pescado los beneficios de este 😉 .

Bacalao en salsa

Ingredientes: 400 gr de lomos de bacalao desalado (yo lo compro congelado: más cómodo ;)) / 4 tomates / 1 cebolla / 1 puerro / 1 diente de ajo.

Picamos la cebolla, el puerro y el ajo. Picamos también el tomate previamente pelado. Ponemos una sartén con un chorreón de aceite en el fuego suave. Cuando alcance la temperatura adecuada echamos las verduras en ella (sin el tomate). Dejamos pochar la cebolla y añadimos después el tomate. Volvemos a dejar pochar.

Secamos bien el bacalao al que podemos quitarle las espinas con unas pinzas, si le vemos alguna. Añadimos al sofrito un chorreón de vino blanco y dejamos que hierva un poco. Disponemos el bacalao en la cacerola con la piel hacia arriba, y cocinamos 5 minutos. Damos la vuelta y lo dejamos otros cinco.

Dejamos que repose un rato antes de servir.

Fuente: Envés del paquete de bacalao congelado, aunque ellos lo hacen con pimiento verde y yo le he echado puerro 😉 .