Ingredientes: 300 gr de rosada (aunque vale cualquier otro pescado parecido: panga, gallo, hay infinidad), 2 huevos, pan rallado.
Se cortan los trozos del pescado en trozos a ser posible como si fueran «varitas». Las empanamos como si fueran filetes de carne: primero mojamos en el huevo y luego las pasamos por el pan rallado. Si queremos que salgan más crujientes y con empanado más grueso, lo pasamos otra vez por el huevo y el pan (yo lo hice así).
Ahora si queremos los podemos freir en la freidora, pero para que salgan cero-aceitosas las dispondremos en la bandeja del horno sobre un papel sulfurizado (o una lámina de teflón o de silicona) para que no se pegue. Lo metemos al horno a media altura a unos 200º y las horneamos hasta que esté el pan dorado. Se puede servir con un arroz blanco y salteado con ajito y aderezar con mayonesa, de lo contrario resultará un poco seco.
Es una manera más de ofrecer a aquellos que no les gusta el pescado los beneficios de este 😉 .